Cada día recibimos muchos estímulos desde todos los medios, aún así conseguimos recordar algunas de esas marcas. Otras menos llamativas, menos impactantes, o que no nos interesan desaparecen casi de inmediato de nuestra memoria «pre-carga». Las que traspasan la barrera de la indiferencia llegan a nuestro disco duro, donde nada se olvida sino que solo se necesita la «keyword» o estímulo necesario para que se vuelva a evocar a nuestro memoria más inmediata.
Una forma diferente a la carteleria de exteriores en paradas o grandes vallas publicitarias es insertar o pasear elementos publicitarios en el ecosistema de la ciudad.
Desde grandes autobuses a pequeños coches, con vinilo, situados en lugares estratégicos.
Digo estrátegicos, porque o bien pasa por ahí tu público objetivo de todas, todas. O bien porque es un mensaje generalista sin discriminación. En este segundo caso, lo importante es situar el vehículo en un lugar de abundante tráfico.
¿Qué mejor que a la entrada del parque más visitado de la ciudad?

Blog para apasionados del Marketing, Internet, Comercio Electrónico, Empresa y Negocios Digitales.